martes, 5 de julio de 2011

Tienes un Whatsapp

Cada vez tenemos a nuestro alcance más y más formas para comunicarnos y sin embargo nos comunicamos peor. Facebook, Twitter, Blogs, SMS, Whatsapp sustituyen ahora al clásico café con leche o caña que compartíamos al salir del trabajo. Ni siquiera nos molestamos en levantar el teléfono para contar algo. Whatsapp, un mail...es gratis.

A esto hay que añadir las abreviaturas que vamos incorporando al lenguaje escrito a veces indescifrables, el particular idioma del Iphone que transforma besitos en besugos, pececitos en pedacitos o jajajajaja en jamábais y el tono de lo que escribimos que puede ser interpretado de mil formas.
No es lo mismo ver a alguien llorar que un icono amarillo con dos chorros de agua de cada lado. No es lo mismo compartir un momento feliz que siete iconos amarillos con la boca abierta. No sabe igual este "t exo d -".
Decimos poco y mal pero también demasiado. Los silencios no se valoran, hay que amortizar la tarifa plana que pagamos cada mes y las palabras fluyen sin ser reflexionadas, sin ser necesarias y olvidamos que detrás de la máquina alguien nos está escuchando.

Y así poco a poco vamos desvirtuando tanto las relaciones humanas que nos escondemos detrás de nuestros móviles y de nuestros ordenadores para transformar un Te quiero en un icono ❤ y un beso en una onomatopeya (Mua). Y con eso hemos cumplido.

Y así poco a poco vamos desvirtuando tanto todo que por cobardía acabamos rompiendo una relación por Whatsapp. Es la era de las nuevas tecnologías señores, ahorro de tiempo, de malos ratos y de romanticismo.

Sin embargo, ahora que compartimos tantas y tantas palabras por minuto, tantos mensajes e iconos me pregunto que queda realmente. ¿Se puede de verdad expresar sentimientos, pensamientos o vivencias con la mitad de las letras, abreviaturas, iconos, sin tono, sin gestos, con erratas y palabras sustituidas? Creo que sólo se comunican bien los valientes, los que saben hablar mirando a los ojos y los que están preparados para escuchar.

A mi me quedaban muchas cosas por decir...pero recibí un whatsapp.





(Patrick Bruel debería cantar,
On aurait pu se dire tout ça...D´une autre façon que par whatsapp...)


3 comentarios:

  1. "El que da todo lo que tiene no está obligado a más...."

    ResponderEliminar
  2. Cada uno es libre de escoger el "The end" que quiere para su película...
    Lo que para unos es "Todo" para otros es "Insuficiente"...

    ResponderEliminar
  3. Yo no tengo whatssap, ni iPhone, ni iPad, ni video consolas...yo prefiero escribir cartas manuscritas que emails, aunque los escribo también, yo prefiero el café con amigos a una llamada de tel, aunque uso skype también. Uso internet a diario por mi trabajo, aunque como ya se ha mencionado antes, cada uno usa sus límites como mejor le conviene.
    Gracias por el post :) Buena lección x

    ResponderEliminar